El miedo al parto es muy humano, no solo en madres primerizas, sino también, en quienes ya han sufrido alguna experiencia traumática previa. Este temor está vinculado con el miedo a perder el control de una situación. En este de circunstancia, en el momento de dar a luz, cada mujer toma conciencia de que hay aspectos que no puede controlar. Esta es una de las razones por las que, para superar el miedo al parto, es muy importante que pongas tu atención en aquello que depende de ti, pomiedor ejemplo, poner en práctica todo lo aprendido en el curso de preparación.
El parto es el instante final de la gestión, así como los síntomas de embarazo marcan la fase inicial. Lo que no debes hacer es contaminar tus nueve meses anticipándote al futuro. Por tanto, el mejor modo de controlar este temor es ocuparte del ahora. Tener cada día un objetivo actual y cumplirlo. En otros casos, el temor también surge a partir de la imaginación de conocer historias de partos difíciles que otras personas comparten contigo.
En este tipo de casos, aprende a marcar límites. No escuches ese tipo de historias. Cada parto es único y la naturaleza es muy sabia. Es decir, así como tu corazón palpita sin que tú hagas nada para que funcione correctamente, cuando llegue el momento del parto, también sabrás actuar siguiendo el instinto de la ley natural.
El miedo al parto también está asociado a otros temores. Por ejemplo, miedo al dolor o incluso, temor a la muerte. ¿Por qué es tan importante reducir el temor? Porque las emociones también pueden afectar a nivel físico, aportando tensión o incluso, incrementando el dolor como consecuencia del estrés.
Consejos para superar el miedo al parto
Para superar el temor al parto también es muy importante que asistas a todas las clases del curso de preparación. Llega con puntualidad para aprovechar el tiempo de cada sesión a nivel teórico y práctico. Por ejemplo, aprenderás a reconocer la fase preparto, podrás identificar los síntomas del parto o también, saber cuándo estás ante una falsa alarma. Este aprendizaje es muy importante porque te ayudará a estar preparada cuando llegue el momento.
En ocasiones, el miedo también surge ante la idea de que el bebé pueda nacer con algún tipo de problema de salud. En este caso, es muy importante que te tranquilices. Piensa en positivo porque los avances médicos convierten la experiencia de la maternidad en una vivencia muy segura. Además, tendrás un seguimiento continuado de la evolución del embarazo a través de las diferentes pruebas, por ejemplo, las ecografías. Habla con tu médico, expresa tus dudas puesto que como profesional puede tranquilizarte con datos objetivos. La información del experto es vital para calmar esas dudas que pueden angustiarte como consecuencia de la incertidumbre. No conviertas Google en la respuesta a todas tus dudas porque cada embarazo es diferente. La información online debe ser complementaria a la que tu especialista te indique directamente.
Observa como natural el miedo al parto. Es decir, no pretendas reducirlo a cero porque es normal que en algunos momentos, especialmente, cuando se acerca la fecha de dar a luz, sientas algún tipo de inquietud. Sin embargo, sí puedes aliviar este sentimiento a través de los ejercicios de relajación, las técnicas de visualización y el uso de pensamientos positivos que te dan fuerza a modo de mantra.
Recursos personales para controlar el temor al parto
La práctica de técnicas de relajación durante el embarazo te ayuda a poner cuerpo y mente en armonía. Esto te aporta seguridad. También es recomendable que conozcas personalmente el hospital en el que vas a dar a luz. Visualizarte allí te dará tranquilidad. Infórmate también sobre los beneficios de la anestesia epidural para tomar decisiones para cuando llegue el momento real. Uno de los principales beneficios de la epidural es la reducción del dolor físico.
Si no existe ningún tipo de contraindicación médica también puedes practicar yoga prenatal. Esta práctica te ayuda a reforzar el control mental. Algo muy importante porque en ocasiones, el origen de un sufrimiento físico tiene su origen en un bloqueo emocional que se ha somatizado. Realizar ejercicio físico seguro como el aquagym puede ayudarte a mantener un buen estado de forma física. Esto es beneficioso porque la actividad eleva el sentido del humor, refuerza los niveles de optimismo, es una forma de gimnasia física pero también, mental. Por tanto, también reduce el temor.
No te encierres en tu propio temor. Durante los cursos de preparación al parto, habla con tus compañeras. Te darás cuenta de cómo tus temores son totalmente naturales pero esto te ayudará a no llevarlos al plano personal. Enfócate en lo positivo del momento que vives. Cuando lo haces, todo fluye mejor.
Escuchar música, el cine y la lectura son planes de entretenimiento que pueden ayudarte a distraerte. Sin duda, una técnica sencilla para olvidar el temor al parto es distraer la atención hacia un fin diferente.